Estoy en pleno cambio de decoración de mi rincón de trabajo, por eso tantos lunares, así que espero que os guste. Los colores elegidos son: blanco, negro y rosa, esta vez paso de violeta que es un poco fúnebre.
Hoy os traigo una manera de reciclar cajas de fresas, me parecen geniales para preparar cestas de regalo, estanterías, cajas para guardar reta es, etc
En todas las páginas que he visto, las lijaban un poco antes, yo estaba impaciente y me salté ese paso y quedó genial.
Necesitamos: 1 caja de fresas
Pintura acrilíca del color deseado
Una brocha o pincel
Un recipiente de plástico para echar pintura
Pegamento
Papel para decorar (si quereis, porque se puede pintar en vez de poner papel)
Pintamos, un consejo, lo entendí con la segunda o tercera caja, la primera capa que pongamos sobre las letras, debe ser más oscura, en las páginas que miré para informarme, echaban betún de judea, como no tenía, eché directamente la pintura.
Fueron necesarias unas 3 manos de pintura
Luego me di cuenta que malgasté la pintura porque yo le iba a poner papel de regalo pegado
Recorté el trozo de papel de la medida de la caja y lo pegué con cola blanca
El fondo de la caja lo quería en otro color, así que lo pinté de rosa
El rosa era demasiado fuerte, así que cuando secó lo cubrí con ago de blanco y pegué estrellitas de washitape recortadas con troquelador.
Espero que os haya gustado.
Besitos a tod@s*
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